Como hemos comentado antes, muchas familias deciden educar a sus hijos e hijas en casa. Nos encontramos con 3 formas diferentes de educar a los niños en casa.
Por una parte, nos encontramos con la educación libre o no formal. Este tipo de educación se centra en que cada niño tiene una capacidad propia para aprender, y que el propio sujeto es el más indicado para descubrir sus propios potenciales, no por la repetición o memorizando la información, si no que ensayando. Se considera más natural la manera en la que los niños se integran a la sociedad.
Esto se lleva a cabo por medio de supervisión por parte de personas especializadas, ya que de otro modo las familias se confunden y creen que el niño autodidacta logra los mismos resultados académicos y de integración social que los niños que son educados por el modelo tradicional.
Por otra parte, tenemos la educación curricular en el hogar, que reconoce como la más adecuada a la estructura curricular de las escuelas y colegios para que los niños lleguen a tener una educación completa y se desarrollen en el ámbito social, también de manera completa. De este modo, los padres son agentes de educación, que intermedian entre la educación de la prpia escuela y la educación que estos ofrecen a sus hijos; por lo tanto, son los padres quienes guían a sus hijos en la enseñanza, aprendizaje y la propia educación.
Por último, encontramos las formas intermedias de educación en el hogar. Un gran porcentaje de las familias que han decidido tomar el camino de la educación en casa, han tomado metodologías intermedias a las descritas, para así dar diferentes grados de libertad a la hora de educar a sus hijos y que estos aprendan.
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